Recuerdo que
hace aproximadamente seis meses, me diagnosticaron una osteoartritis en la
rodilla con su consiguiente degeneración del cartílago, el traumatólogo me dijo
que debía dejar de correr, recuerdo que fueron unos días difíciles y un buen
golpe duro, pero gracias a toda la gente que tengo a mi alrededor, aprendí a
generar en mi, estados de ánimo para poder sortear los baches y piedras que nos
van surgiendo por el camino y salir así más impulsados... y mira tu por donde,
que un 6 de Abril, me encontraba yo debajo del helado arco de salida de la
localidad de Prades, dispuesto a sortear baches y piedras durante los 90 km y 4150 mtr+ que nos
deparaba el II Ultra Trail Muntanyes Costa Daurada.
En el cajón de
salida nos encontramos con gente conocida, saludos a todo el personal, caras
heladas, pues los dos grados bajo cero en los que nos encontrábamos iban
haciendo acto de presencia.
Se da la salida y allá vamos, en los primeros
kilómetros se van escapando un grupo de cinco corredores, por detrás nos mantenemos
otros cinco más en los que me incluyo...
Pasan los
primeros controles de paso y los primeros pueblos, durante los 20 primeros
kilómetros me mantengo con un grupo de cinco en el que hay alguna cara
conocida, intento mantener un ritmo constante pero controlando en todo momento
no pasarme de rosca, una vez salimos del control del Montsant, nos viene la
primera subida fuerte, el grupo se va estirando y yo me voy descolgando, no es
mi lucha pienso, coronamos la Siurana, y una bonita bajada con algún tramo técnico
nos llevan a una zona muy corredora por pistas y sendas muy limpias, en 4h19'
me planto en el km 42,6, el control de Vilaplana, ahí decido cambiarme por
completo toda la ropa, fuera camiseta, pantalón, la gente empieza a chillar
(luego comprendí que no era por que me quede en calzoncillos, si no porque
estaban animando a la gente que iba llegando... jejejeje), una vez cambiado,
como algo, y de nuevo a buscar la segunda de las subidas exigentes del día,
casi 1000 mtr+ en unos 5 km ,
el sol hace acto de presencia y se va notando, la subida la voy haciendo
caminando a buen ritmo, manteniendo en todo momento posiciones, me han hecho
saber en el control que voy 10, no está mal, me veo con fuerzas y esta segunda
parte de la carrera es realmente dura, corona bien, empiezo a bajar, y doy
alcance a dos corredores, me coloco 8, y entonces empieza a llover, torpe de
mi, intento sacar el chubasquero sin tener que parar pero no lo consigo, al
final paro, y entre sacarme el chubasquero, ponérmelo y volver a correr pierdo
más de minuto y medio y me vuelven a adelantar los dos corredores, esto es algo
que debo mejorar, estoy un rato dándole vueltas a la cabeza, pero decido no
agobiarme y seguir con mi ritmo, si he conseguido darles alcance antes con el
ritmo que llevaba, lo tengo que hacer ahora igual...
Llegados al
control del km 63, en una preciosa zona, la lluvia deja de paso otra vez a un
sol radiante, de nuevo una pequeña subida que nos lleva a una zona de bajada
por pista y terreno de asfalto, donde consigo adelantar tres posiciones, me
coloco 7 y con fuerzas, llegados al km 72, me queda una subida bastante fuerte
de unos 10 km ,
empiezo a afrontarla, a un ritmo muy bueno, llegados a un punto, la zona se
suaviza y empieza una senda por un cresterío impresionante, allí me adelanta un
corredor, va muy fuerte, no consigo aguantar su ritmo, y me digo que he de
hacer mi carrera, en la bajada antes del control del km 80 le vuelvo a dar
alcance, pero al pararme al avituallamiento el se me escapa, cojo un sandwich
de nutella, le doy un par de mordiscos, último gel, y a por los últimos diez
kilómetros, son 6 en subida y 4 en bajada, me veo que voy trotando en la subida
y eso me anima, me encuentro bien, con algunos amagos de calambres en las
piernas por el esfuerzo, los cambios de temperatura del día y demás, pero me
siento con energías, al culminar la subida está el último control de paso, los
chicos de la organización me cantan que tengo a dos corredores a menos de tres
minutos y que van petados... me digo, nen, a dar todo lo que tengas, en el
último tramo de pista subiendo doy con ellos, y me pongo a tirar, no he de
bajar los brazos ni el ritmo, veo que los voy descolgando y en la bajada decido
dar el resto, me lanzo a tumba abierta y consigo despegarlos, para poder
disfrutar de la entrada en meta con el sabor de un 6 puesto absoluto, y con el
sinsabor de haberme quedado 4 de mi categoría, a un paso de poder subir al
podium, pero muy contento de las sensaciones que tuve en todo momento...
Al entrar en
meta, no pude remediarlo, me vine abajo y me saltaron las lágrimas, le debía
una carrera así a esa gran persona que ha luchado para conseguir superar una
grave enfermedad, recuerdo cuando después de mucho tiempo lo volví a ver con
unas zapatillas puestas corriendo, dándome cuenta que esas zancadas si sabían
lo que es ganar una carrera importante, lo que es el sacrificio y el dolor...
Entonces
recordé que debería agradecer cada zancada, cada carrera y cada sonrisa que veo
en los demás cuando llego a meta, que mi familia este pendiente en todo momento
de mis pasos desde la lejanía, o siguiéndome en cada control después de
recorrer 300 km
en coche (Gracias Carlos, Maica, Gregor), o que sepas que tu pareja, aún
corriendo la misma carrera, aún tenga fuerzas para preguntar por ti en cada control
de paso (Gracias Sonia)... El verdadero valor de estas carreras largas, es el
esfuerzo que hacemos cada una de esas personas solamente por no derrumbarse y
por llegar a meta como uno más.
Ahora toca
preparar la CSP, Toca volver a volar, toca volver a empezar...
Joder David!! Mas ficat la carn de gallina. Bonica crónica i molt emotiva, felicitats !!
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